Este 25N de nuevo tomamos las calles en Morata de Tajuña para decir BASTA a la violencia contra las mujeres.
Cuando éramos pequeñas nos acompañaba,
Tralarín,tralarán
Nos parecía divertido,
Tralarín, tralarán
Nos gustaba dar la vuelta y ver que seguía ahí detrás,
Tralarín, tralarán
Nos daba seguridad,
Tralarín, tralarán
Nos daba risa,
Tralarín, tralarán
Nos hacía sentir importantes,
Tralarín, tralarán.
De pronto un día nos giramos y vimos quien realmente era.
Dejamos de cantar,
las lágrimas afloraron.
El tiempo se llenó de aire,
el aire de rosas,
las rosas de nostalgia,
y éstas de miedos.
Ya no había disculpas,
ya no había tristeza,
ni alegría ni música,
solo miedo, miedo y rabia.
Un silencio mortal,
y muy de cerca,
como respirando en nuestra nuca
Esos ojos juzgadores
Inexpresivos, autoritarios.
¡Rie! ¡Canta! ¡Baila!
Ya no pudimos hablar,
tenemos un nudo en el vientre.
¡¡Cuídadme!! Nos ordenó.
Abrimos la puerta y nos fuimos.
Fragmento de un poema colectivo del taller de escritura del 25N.